El imperio del agua

Para homenajear  el Día Mundial del Agua, valoré la cantidad del líquido que consumo para bañarme, afeitarme, lavar la ropa y para fregar, me  di cuenta que podía utilizar menos agua y obtener los mismos resultados.  Revisé los posibles salideros de los grifos y conexiones hidráulicas, donde también tomé mis providencias.

Además reporte a las entidades competentes los salideros que en mis recorridos detecté por las calles.

Sugiero que las instalaciones nucleares que  tanta agua utilizan sean cerradas.  En los fregaderos de autos, ómnibus y otros medios de transporte  se debe volver al viejo sistema del hombre con el balde, la esponja y la gamuza que utiliza menos agua, favorece el crecimiento de empleos,  eleva la comunicación interpersonales y deja los autos más relucientes que los fregaderos mecanizados.

Reclamo crear un frente común para que todos los países del mundo condenen y prohíban los bombardeos indiscriminados que destruyen también los sistemas hidráulicas, contaminan las aguas o interrumpen el abasto  a los ciudadanos.

Asimismo la utilización de cañones de agua para reprimir manifestaciones es una practica doblemente intolerable, porque causa daños sobre las personas y  la sanidad ambiental.

 No tenga nada que sugerir a aquellos que viven bajo condiciones  tribales, en favelas o en barrios paupérrimos; los que habitan  en chozas o en las calles, porque esos…  no tienen agua que puedan ahorrar.